Día a día, parece que estamos luchando contra los hábitos y malas costumbres que hemos ido adquiriendo a lo largo de nuestra vida. Se nos hace difícil lidiar con algo que nosotros mismos hemos creado y alimentado durante tanto tiempo, para ahora descubrir que nos lo “tenemos que quitar de encima”.
Los hábitos diarios tienen una enorme influencia en nuestra vida, y por supuesto, los malos hábitos nos limitan, nos enferman y envejecen. Por eso necesitamos deshacernos de ellos.
Como dice un gran sabio, “No luches contra tus hábitos, míralos de frente, asume que en un momento quizás te fueron útiles, y simplemente diles adiós. No te enfrentes a ellos, pero no los alimentes más. Párate y piensa qué quieres hacer a partir de ahora, y simplemente graba en tu mente y en tu corazón tu nuevo destino”.
Parece fácil, pero hemos de reconocer que nos cuesta decir adiós a nuestro “viejo yo”.
A estas alturas de nuestra vida, ya hemos sufrido en carnes propias los problemas físicos, emocionales y mentales que nos generan los “malos hábitos”, y nada mejor que el hartarnos de una situación, que sabemos no nos conduce a buen puerto (enfermedades, baja autoestima, desánimo y frustración), para que digamos “SE ACABÓ, YA BASTA. QUIERO UN CAMBIO, UNA MEJORA".
Hoy es el día, ahora es el momento; “Saca la basura”...(de tu mente) es lo que recomienda la película El Guerrero Pacífico.
La solución está en nuestras manos, sustituirlos por unos hábitos de vida saludables, que nos ayudarán a tener una vida equilibrada en todos los aspectos.
Incluso si vienen malos tiempos, seremos capaces de superarlos con el mejor talante y de la mejor manera posible.
Hábitos adecuados para llevar una vida diaria sana y equilibrada
1. Bebe suficiente agua
El agua es el elemento más importante para la vida, ya que participa en multitud de funciones corporales. Es esencial para el desarrollo de procesos orgánicos como la digestión, así como en la absorción y eliminación de desechos. Además, estructura el sistema circulatorio y distribuye nutrientes hacia todo el cuerpo a través de la sangre.
Para mantenernos sanos necesitamos beber la cantidad de agua adecuada, teniendo en cuenta nuestro peso.
2. Practica ejercicio físico correcto para tu estado de forma
El sedentarismo es enemigo de la salud. Por eso, si quieres mejorar tu vida, uno de los hábitos diarios que debes establecer en tu vida es la práctica de ejercicio físico moderado, acorde a tus circunstancias, estado de salud y capacidad física actual.
Añadir la práctica de ejercicio a tu vida diaria es un hábito fundamental para tu salud.Tu cuerpo irá mejorando día a día con la práctica. Y también aumentará su capacidad para asumir retos mayores.
No estamos hablando necesariamente de practicar algún deporte. Puedes hacer muchas actividades que ayudarán a mantener tu cuerpo en forma y activo, como caminar, subir escaleras, etc. Otras actividades te ayudarán a intensificar tu vida social, y te lo pasarás muy bien. Mejorarán no solo tu cuerpo, sino también tu estado de ánimo. Prueba a salir de excursión o ir a bailar. También puedes apuntarte en clases de yoga o pilates para un ejercicio suave pero muy beneficioso en muchos aspectos.
También te recomiendo que hagas sencillos ejercicios de resistencia en tu propia casa (utiliza pesas "caseras", marcos de las puertas, pared, etc.)
3. Empieza a llevar una alimentación saludable y equilibrada adaptada a tus necesidades nutricionales
Este parece ser uno de los hábitos saludables más difíciles, nuestra vida, llena de responsabilidades y compromisos, parece que no nos deja tiempo para planificar y llevar una alimentación adecuada.
Sin embargo este es un pilar muy importante y necesario si queremos tener una vida saludable y sentirnos bien.
Cada etapa de la vida requiere una alimentación adecuada, por ejemplo, no es lo mismo tener 15 años y en pleno proceso de desarrollo que 55 años, edad en la que nuestras necesidades nutricionales han cambiado bastante.
La influencia de los nutrientes en los diferentes órganos y en los distintos procesos que tienen lugar en nuestro organismo, a lo largo de nuestra vida, ha sido constatada por innumerables estudios.
También es importante saber que determinados alimentos, gracias a sus nutrientes específicos, pueden ayudarnos a superar algunas enfermedades. La nutrición es esencial para que el organismo funcione de manera adecuada.
Además ayuda a prevenir enfermedades al no caer en déficits nutricionales.
Otro aspecto importante es que una dieta adecuada te permitirá alcanzar y mantenerte en un peso corporal saludable. Algo clave para sentirte mejor y para prevenir problemas graves de salud. Y es que el sobrepeso y la obesidad son un factor de riesgo importante de enfermedades tan graves como el ictus o distintas cardiopatías, entre otras.
Si no sabes cómo seguir una dieta saludable y equilibrada, contacta conmigo y te ayudaré a planificar tu alimentación.
4. Aprender cosas nuevas te hace más feliz
Las investigaciones han encontrado que la dopamina está estrechamente relacionada con el proceso de aprendizaje. Responsable de la motivación, energía mental y control de los impulsos.
Aprender algo nuevo te da seguridad para opinar y abordar los problemas con menos ansiedad.Además te brinda la oportunidad de conocer otras personas y experimentar otras formas de hacer las cosas.
5. Cuida tu sueño
Es muy interesante saber que durante el descanso nocturno en el organismo tienen lugar una serie de procesos claves para la salud. Estos afectan al metabolismo, la salud hormonal o la recuperación muscular. Ademá influye poderosamente en la salud mental y en el bienestar. Por eso es importante implementar en tu vida hábitos diarios enfocados a disfrutar de un sueño de calidad.
Crea una rutina nocturna que favorezca la relajación y la conciliación del sueño.
A continuación te doy algunas recomendaciones.
- Ir a dormir a la misma hora cada noche.
- No pasar tiempo frente a cualquier tipo de pantalla (TV, PC, etc.) al menos una hora antes de irte a dormir.
- Si tienes dificultad para conciliar el sueño, sigue una rutina que te ayude a relajarse antes de dormir (meditar, leer o escuchar música).
- Evitar las siestas largas. De 10 a 20 minutos suele ser la duración recomendada. Es la ideal para generar un impulso en la energía y afrontar el resto del día.
- Evitar las cenas pesadas.
6. Elimina el estrés de tu vida
La mayoría de las personas somos conscientes de estar viviendo en una sociedad estresada, lo que está generando patologías relacionadas con esta situación (ansiedad, depresión, insomnio, contracturas y un largo etc.)
Nuestros hábitos diarios necesitan estar orientados a controlar, y si es posible, eliminar el estrés. Sólo así podrá mejorar nuestra calidad de vida.
-
Aprende técnicas de relajación física y mental. En este aspecto ejercicio suave como pasear nos puede ayudar. Leer y escuchar música suave también nos puede ayudar.
-
Ríe, es difícil sentir ansiedad cuando te ríes. Es bueno para tu salud y te puede ayudar a liberar el estrés:
- Reduce tu respuesta al estrés.
- Reduce la tensión al relajar tus músculos.
-
Tomar ácidos grasos Omega 3; Un estudio demostró que los estudiantes de medicina que recibieron suplementos de omega 3 experimentaron una reducción del 20% en los síntomas de la ansiedad.
-
Tomar medidas para no relacionarte con personas tóxicas y aprender a decir ‘no‘, te ayudarán.
-
Aprende a planificar tu vida para que vivir sin estrés sea una realidad.
7. Identifica los hábitos diarios que te perjudican y elimínalos de tu vida
No solo es importante conocer los hábitos de vida saludables. También lo es identificar los hábitos diarios que están perjudicando a tu salud y calidad de vida. Solo así podrás tomar medidas para eliminarlos definitivamente de tu día a día.
A continuación te indicaré algunos hábitos cotidianos perjudiciales:
- Sedentarismo.
- Mala alimentación basada en alimentos altos en azúcares, sal o grasas no saludables.
- No hidratar tu organismo a través de agua, frutas y verduras frescas.
- Dormir poco.
- Consumo de productos y sustancias perjudiciales para la salud, como el tabaco o el alcohol, entre otras.
- Automedicarte para aliviar el dolor, para dormir o por otros motivos.
- Ir siempre corriendo y con prisa.
- Pasar muchas horas en posturas inadecuadas para el sistema locomotor.
- Descuidar la higiene bucodental.
Mejora tus hábitos diarios y disfruta de mayor bienestar y una mayor protección de tu salud física y mental. Si necesitas ayuda para ello, solicítala. Estar y sentirte mejor son razones suficientes para hacer cambios en tu rutina diaria.